Trampas y autoengaños de la adicción (II). “Yo controlo.”

Trampas y autoengaños de la adicción (II). “Yo controlo.”

La adicción es la enfermedad del autoengaño. En una entrada anterior analizamos cómo el cerebro del adicto crea sus propios argumentos con la única finalidad de mantener el consumo puesto que percibe éste como una cuestión de supervivencia, cosa que objetivamente no es así (https://clinicaefficiens.com/trampas-y-autoenganos-de-la-adiccion-que-son-y-como-combatirlos/). Nadie necesita una droga que destruye para poder sobrevivir. Todo ello no deja de ser una trampa que la enfermedad va poniendo en el inicio de la recuperación o en el camino de la misma.

Avanzando en este conjunto de artículos que tienen como objetivo el aprender a desenmascarar la enfermedad adictiva, hoy nos acercaremos a un frecuente discurso que muchas veces hemos oído de labios de los que la padecen: “Yo cuando quiero consumo y cuando quiero dejo de consumir”, “Puedo consumir controladamente.” Seguramente estas afirmaciones nos son familiares.

Se ha comparado muchas veces la adicción con un enamoramiento tóxico. El adicto vive “enganchado” a su sustancia o a su conducta adictiva. Al igual que el enamorado, el adicto no quiere ni pensar en dejar su enganche, porque piensa que “se morirá sin ver o estar con la persona que es objeto de su enamoramiento”.  Pero en el fondo sabe que también le perjudica, que le está dando problemas. ¿Cuál es la solución en la mente del adicto? Vivir en el límite, sin pasarse, bordeando continuamente un terreno peligroso. El sueño del adicto es seguir consumiendo pero controlando. Pasear por un río con un pie en cada orilla, sin caerse al agua, pero tampoco caminando por camino seguro. Consumir una droga, pero que no tenga muchas consecuencias negativas en su vida. ¿Qué ocurriría entonces si ese río se hace más ancho? Hay que tomar una decisión. ¿Qué ocurre con la conducta adictiva? Que tarde o temprano, tu cuerpo te pedirá más. ¿Qué hacer entonces?

Lógicamente, la adicción quiere que te mantengas en ella, entonces el cerebro del adicto crea una falsa expectativa: “Tú vas a poder controlar tu consumo, porque tú puedes”.

Aplicando los tres pasos para combatir los autoengaños (identificar, familiarizarse, cuestionar) los dos primeros nos llevarían a identificar esos pensamientos y a familiarizarnos con ese discurso de falso control que elabora la mente adictiva. Este discurso suele ser de empoderamiento ante la adicción y pretende dotar al enfermo de unas supuestas fuerzas que a la larga demostrará que no tiene. Por supuesto, no necesitará de nada ni de nadie y, en caso de abrirse a esa posibilidad, será con alguien que sea fácilmente manipulable.

Sin cuestionar si es cierto o no que haya quien controle su consumo, veamos dónde está el punto débil de esas trampas:

  • Es conveniente que el adicto se pregunte sinceramente cuántas veces se ha cuestionado su capacidad para controlar.
  • Si alguna vez se ha planteado seriamente controlar el consumo, ¿cuántas veces lo ha conseguido?
  • ¿Puede ser que alguna vez el adicto se haya parado a pensar cuando estaba consumiendo que se estaba pasando o que se haya dado cuenta de que disminuían sus fuerzas para parar?
  • Quizás compañeros que son testigos de su consumo han advertido alguna vez que se estaba pasando y se han preocupado por ello.
  • Por último, conviene también que el adicto se pregunte cómo se imagina su vida dentro de 5 años sin dejar el consumo, ¿estará mejor que ahora?

El adicto en el fondo es más listo que sus argumentos y estas preguntas pueden encerrar un significado para él que es bueno aprovechar para su propia ayuda. Frecuentemente nos empeñamos en hacer caso a pensamientos que sabemos que no son reales por mucho que nos engañemos. Una cosa sí debe quedar clara honestamente: Nadie puede dejar de consumir por sí mismo. Todo lo que pase de ahí es autoengaño y prolongar una situación que no beneficia a nadie, ni al enfermo ni a los que le rodean.

La Clínica Efficiens, centro de desintoxicación en Córdoba, cuenta con un equipo multidisciplinar que puede ayudarte a solucionar el problema de la adicción tanto si lo sufres tú como algún familiar. No dudes en ponerte en contacto con nosotros si necesitas ampliar información o recibir orientación profesional.

Leave a Comment

LLAMAR AHORA